Título: Marcas en la ciudad, eso son los monumentos, y no se pueden borrar, ni evitar.
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Entrevista a Nora Cortiñas
Por: Nora Strejilevich

El monumento es una escultura, o una figura arquitectónica que representa una parte de la historia, y puede ser alegórico o de una persona. Para mí el monumento tiene tiempo, historia e ideología. Nosotros, en este país, tuvimos gobiernos conservadores, liberales, neoliberales, populistas, pero populares no tuvimos. Entonces, de los monumentos que tenemos, muy pocos representan a figuras que hayan descollado desde el pueblo, desde la base. Representan el poder. El poder en algunos casos marcadamente racista y facista.
A pesar de lo que llamaron descubrimiento pero que fue la conquista de América y el avasallamiento de los pueblos de América, hay un monumento en la Patagonia exaltando la figura de Roca, el mismo que mató a las comunidades indígenas en la famosa campaña al desierto. Por eso ahora, cuando se cumplen 504 años de la conquista, unos indígenas, como no pueden tirarlo abajo porque hay que hacerlo con dinamita, y como el gobierno no va a reconocer que fue un hecho sanguinario, en señal de protesta lo cubrieron con una manta. Hay otros monumentos a gente que lo que hicieron fue matar y diezmar poblaciones. Analizando, uno ve que muestran una ideología determinada, y el racismo que es muy fuerte en nuestro pais. La mayoría de estos monumentos están en lugares aislados, en pueblos o en barrios, de manera que la gente poco sabe.
Entre paréntesis, monumentos a mujeres hay muy pocos, y uno que había sido hecho por una mujer, la fuente de las Nereidas, de Lola Mora, lo trasladaron a un rincón, a un lugar donde no pasa nadie, cerca del Río, en la costanera. Hay monumentos a la madre, como símbolo de madre reproductora, el monumento típico de la madre con la criatura en brazos. De manera que el monumento tiene un metamensaje de acuerdo a la época, a dónde está emplazado, etc.En cuanto a hacer monumentos con este drama de los desaparecidos, desde hace tiempo estamos peleándolo mucho. Primero, hace unos cuantos años, cuando llegó el gobierno constitucional, se pretendía hacer un monumento con doble faz, que representara a los desaparecidos de un lado, y del otro lado a las fuerzas armadas, a los caídos de las fuerzas armadas. La famosa teoría de los dos demonios, empujada por gente que está en la política. Se repudió y quedó en la nada. Nosotras lo único que aceptamos como homenaje es algo que rememore a los desaparecidos, asesinados y caídos en combate, y a los caídos en las Malvinas, como también a los indígenas que fueron avasallados. Porque el tema de las fuerzas armadas es que ellos son parte de una corporación que se cria y se junta para perseguir al pueblo. Entonces no podemos compartir con ellos. Lo que se está haciendo son monolitos con homenajes a los desaparecidos de un barrio, de una zona, o de un hecho muy significativo (la Noche de los Lápices, los estudiantes de ciencias sociales o ciencias económicas de acá) y a todos se les da un cariz de promesa de búsqueda de justicia. O sea, no es el homenaje póstumo, sino que se hace pensando y diciendo que hay un compromiso de la búsqueda de verdad y de justicia. A veces es muy duro, porque hay una coerción, se limitan las posibilidade! s de lo que se puede poner, y la gente va aceptando pensando que por lo menos algo es algo, pero la verdad es que las madres, los familiares, en eso estamos muy claras, en cuanto a cómo tiene que ser el homenaje. Hasta Hebe de Bonafini, que se oponía a este tipo de actos, ahora está participando, porque se da cuenta que el monumento representa un hecho histórico, que hay 30.000 desaparecidos, que existen. Y si uno racionalmente se pone a pensar, no van a aparecer con vida.

Acaba de hacerse un acto en la facultad de Arquitectura de La Plata. Ahí se inauguró un monumento muy simbólico, como una escalera que subía rodeando un árbol, dejándole abierto arriba el crecimiento. Se hizo a través de un llamado a concurso, con un jurado, y de esta manera se van haciendo en esa ciudad monumentos en todas las facultades. Hay otro en Paraná, Entre Ríos. Y hay un video de la escultora haciéndolo, y un folleto. Ese monumento representa la justicia, los nombres, la lucha, las madres de los desaparecidos, todo. Lo apoyó el consejo deliberante de Paraná y dieron dinero diputados, y un equipo que ayudó a la escultora, Amanda Mayor, voluntariamente. Una réplica en miniatura se va a hacer ahora en Cuba.